Aquí les traigo a una niña que nació con una enfermedad rara llamada progeria, envejece ocho veces más rápido que una persona sana.
Ahora, a sus trece años, su cuerpo tiene la edad médica de una mujer de 104 años. Narrando su propia historia por primera vez, Hayley tiene edad suficiente como para ser plenamente consciente de las implicancias de su enfermedad y sorprende por su franqueza.
Pero se niega a dejarse vencer por su afección y está decidida a cumplir sus sueños de ser cosmetóloga y, algún día, encontrar el verdadero amor. Su actitud positiva e inspiradora es inquebrantable.

Hasta luego
