Se terminó el Mundial para el seleccionado argentino de rugby. Los Pumas tenían la parada más brava que podían tener en cuartos de final y se despidieron del torneo al perder con el local, Nueva Zelanda, por 33-10, en un encuentro que se desarrolló en el Eden Park, estadio en el que los All Blacks no pierden desde hace 17 años.
Argentina salió a buscar el partido que se esperaba: tener la pelota, hacer el desarrollo lo más lento posible y jugar pegadito a las formaciones. El problema fue la escasa posesión de la ovalada y, por consiguiente, tuvo que apelar a la defensa para terminar la etapa inicial cerca en el marcador. El gran desgaste físico lo sintió en el final...
El equipo local mostró en el arranque nervios y Marcelo Bosch estuvo cerca de aprovechar un error de Colin Slade. Santiago Fernández intentó con un drop que pasó cerca, aunque fueron los neozelandeses los que abrieron el marcador a los 11m con un penal de Piri Weepu (gran noche con los pies).
Los All Blacks desplegaban toda su ofensiva a lo ancho del campo y, a los 18m, luego de una jugada que contó con más de 15 fases, lograron vulnerar el ingoal argentino por Kieran Read. Sin embargo, la repetición pedida por el árbitro confirmó que el esfuerzo de Nicolás Vergallo por sacarlo dio sus frutos, ya que el octavo rozó la línea antes de apoyar.
Una mala salida del fondo entre Vergallo y Martín Rodríguez Gurruchaga (estaban muy presionados) derivó en un scrum cinco, penal y 6-0. Iban 22m. Argentina no lograba jugar en territorio rival, pero llegó la jugada que paralizó al Eden Park: Leonardo Senatore se levantó en el scrum, quebró la línea de la ventaja y se escapó; asistió a Contepomi, Felipe la salvó con lo justo y el balón derivó luego de un par de pases en Gurruchaga; al fullback lo bajaron a metros del ingoal y llegó Julio Farías para apoyar el try. Gran try. La conversión –complicada- de Contepomi ponía arriba a Los Pumas por 7-6.
Se jugaba la media hora y la ventaja no duró demasiado. Un tackle alto de Contepomi al recién ingresado Aaron Cruden le permitió lucirse otra vez a Weepu y el medio scrum estiró la diferencia en el cierre de la etapa inicial. En el descanso, Nueva Zelanda ganaba por 12-7.
A puro penal se inició la segunda etapa: Bosch achicó la diferencia con un gran remate de mitad de cancha y Weepu volvió a llevarla a cinco (15-10) con un disparo mucho más sencillo. El cansancio ya empezaba a sentirse en Argentina y Nueva Zelanda comenzaba a quebrar con más facilidad el primer tackle. El abanderado era Ma'a Nonu.
A los 18m, Argentina se quedó sin Vergallo por amarilla y 18-10 abajo por otro penal de Weepu, aunque la sacó barata porque Nueva Zelanda estuvo a centímetros (y por varios minutos) de vulnerar por primera vez el ingoal del representativo nacional. Finalmente, la resistencia se terminó a los 26m: Gurruchaga se jugó a la intercepción, quedó a mitad de camino y Kieran Read, ahora sí, apoyó su try.
El infalible Weepu aumentó con su séptimo penal, Brad Thorn apoyó su try luego de una muy buena maniobra de Cory Jane (de los mejores del encuentro) y la conversión de Cruden selló el 33-10 final. Argentina se vuelve a Buenos Aires, Nueva Zelanda buscará dar otro pasó hacia el título ante Australia.

