Estudiantes derrotó por 1-0 a Godoy Cruz en el estadio Ciudad de La Plata, en el segundo duelo de la fecha 14 del Torneo Clausura, y volvió a ganar después de seis partidos. Mientras aún busca un entrenador, el elenco dirigido interinamente por Martín Zuccarelli le sacó jugo al regreso de Verón, ganó oxígeno y hundió un poco más al desorientado Tomba.
Con el retorno de la Bruja, el Pincha asumió la iniciativa pero mantuvo su preocupante cóctel: previsibilidad ofensiva y desorden defensivo. Verón mostró movilidad al volcarse a los costados, pero halló poca precisión y un solo socio, Enzo Pérez. Más allá de un pase largo preciso para el mendocino que derivó en una tapa de Ibáñez, no fue bueno el inicio de Estudiantes.
Al local lo consoló el pobre presente de su rival, que tampoco encuentra el rumbo pese a la llegada de Asad. La apuesta del Turco fue tener un equipo corto que retrocediera y explotara espacios, fundamentalmente por derecha con Cardozo. A los 24, lo tuvo Caruso ante Andújar, en la única réplica peligrosa. El encuentro se bloqueó por la tibieza y las imprecisiones de ambos.
Cuando parecía que el capítulo inicial moriría virgen, llegó el zarpazo de Estudiantes. A los 44, Verón ejecutó un tiro libre desde la derecha con categoría y encontró la cabeza de Desábato, que se arrojó de palomita para festejar el primero. Un tanto lleno de desahogo para un grupo que supo bañarse en gloria y ahora pena como un vulgar mendigo sin DT firme.
En el inicio del complemento, el Tomba asumió una postura más agresiva y coqueteó con el empate a los 2, pero Caruso volvió a dilapidar una chance frente al arquero platense. Asad mandó al juvenil Garro a la cancha para aumentar la propuesta ofensiva. En tanto, Verón sintió una molestia en el aductor derecho y pidió el cambio a los 17. La gente lo despidió con aplausos plenos.
Pese a jugar 20 metros más atrás, Estudiantes no sufrió con los avances mendocinos. Ya con Benítez por la Bruja, los dirigidos por Zuccarelli manejaron las acciones y amagaron con liquidarlo cuando Pérez y Mercado fueron por derecha. El 2-0 estuvo en los pies de Boselli, pero el nueve ratificó su flojo momento y perdonó a Ibáñez. Y el 1-1 en los de Rojas, que la tiró afuera en tiempo cumplido.Triunfo ajustado y merecido del Pincha.
