Dos alemanes pidieron probar un auto, de un valor de 440 mil dólares, y lo destruyeron contra un poste. El Veritas RS III de la compañía Vemot AG es, o mejor dicho era, el prototipo de un auto de lujo. Estaba en exhibición en una concesionaria de Moenchengladbach, Alemania.
Frans Martin Holtz, de 44 años, y Friedrich Voller, de 53, persuadieron al encargado de la agencia de que les prestara el auto para dar una vuelta. El vehículo en cuestión es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en 3,2 segundos. Los alemanes, previsiblemente, perdieron el control de este poderoso V8 y se estrellaron contra un poste de luz.
La policía los arrestó cuando intentaban huir, dejando atrás el destartalado vehículo. Para los oficiales locales "el auto excedía inmensamente las habilidades del conductor".

